Reminiscencias...
Una sonrisa asomaba lentamente mientras sus ojos permanecían serios. No era fácil reconocer que la vida seguía igual luego de mil singularidades. Misma rutina, mismo camino, mismos gestos, mismas actitudes. Mismas promesas de fin de año que quedaban perdidas en un cajón y que serían repetidas una y otra vez. Era como si hubiera vivido siete vidas como los gatos; ¿o acaso eran nueve? Y mientras luchaba por evitar la marea de zombies inmersos en sus smartphones, continuaba sumergida en sus reminiscencias. Apenas figuras fantasmales de cosas vividas y olvidadas a medias. Nada era igual pero todo seguía como siempre...